Anexo:Mascotas de Un, dos, tres... responda otra vez

Lo que todas las mascotas compartieron en común fue el ser el único regalo cuya aparición era obligatoria por reglamento en cada subasta.En la primera etapa no hubo mascota como tal, y Don Cicuta asumió todas las labores de simbolizar lo negativo del programa.En 1991 se recuperó a Ruperta como mascota, y ya permanecería en el papel hasta el final del programa en 2004.En ese diálogo se podían revelar o no los posibles regalos ocultos que pudiera contener la bota para los concursantes.En su presentación, el Boom y el Crack fueron descritos como dos vagabundos que jugaron su última moneda en una máquina tragaperra.El Boom se llevó el premio gordo y el Crack se quedó sin moneda, no es que tuvieran bondad o maldad, sino que el Boom atraía la buena suerte y el Crack atraía la mala.Ganar el Boom significaba elegir regalo entre los aparecidos en la subasta, y ganar el Crack significaba irse a casa solo con el Crack.Fueron las mascotas que menos programas protagonizaron, y se despidieron al final de la etapa, en enero de 1988.Pero ya que esta temporada no tiene esa función, su labor podrá ser adornar este apartamento en Torrevieja"