En un principio envían a Pablo Orquicia, quien desaparece misteriosamente, y al verse presionados por Maximilian, el presidente, finalmente es Luisa la que se encarga de la tasación.
Finalmente se da cuenta de que Pablo ha sido asesinado y una extraña presencia habita la casa.
Luisa huye despavorida y es socorrida por Santiago: al cabo de cuatro días, se presume que ha desaparecido.
El actor italiano ha podido experimentar un género "casi inexistente" en su país y ha resaltado la "suerte" de trabajar con Paul Naschy.
Alemán ha querido alejarse del terror que se hace actualmente al calificarlo como «tosco, exagerado y fuerte».
Su estructura narrativa simplemente no tiene pies ni cabeza, en demasiadas secuencias parece una película con medios profesionales comandada por un aficionado».
Esa crítica molestó al director e hizo que la película no llamara la atención de muchos espectadores.
[3] Aunque las ha tenido positivas donde valoran la dificultad de llevarla adelante sin ninguna subvención y siendo una ópera prima.