Sus aplicaciones tendrán como objetivo compensar sus dificultades, evaluar sus capacidades, mejorar su comunicación, facilitar sus procesos de aprendizaje, convertirse en una oportunidad de empleo, aumentar sus posibilidades de interacción social y permitirles una sana recreación en un ambiente menos restrictivo (Torres, 2009, p. 1).
El término Kofotecnología (Torres, 2009, p. 1) se compone de tres raíces griegas: kophos, technos y logos.
Kophos (Kofos) significa sordo en griego, teniendo su origen probable en el hebreo utilizado para la escritura de la Biblia (Hervás, 1795, p. 23).
Consideraremos a la Asistencia Tecnológica como parte de la Kofotecnología, entendiendo que ésta no se reduce a las TIC sino que se amplia a “cualquier objeto, equipo, sistema, producto, adaptación y servicio cuyo propósito es el de suplir, aumentar, mantener o mejorar las capacidades funcionales de las personas con discapacidad para realizar todas aquellas actividades que de otra forma no podrían hacer” (SEP, 2006, p. 22, citado por Torres, 2009).
Estos últimos tendrán en ocasiones una aplicación práctica en personas sin discapacidad.