Kiwi amarillo

Tras un proceso de selección, en 1992 se consiguió una cepa que tenía la pulpa amarilla y dulce.

[1]​ En 1998, Zespri introdujo el kiwi amarillo en el mercado japonés, y en el año 2000 en Europa.

[1]​ En cuanto a propiedades organolépticas, el kiwi amarillo tiene una textura menos dura, y su piel más fina, lisa y menos áspera que la del kiwi verde.

Evidentemente, el color también es una diferencia visual, y su sabor es marcadamente más dulce que el kiwi verde.

En 2012, casi la mitad del kiwi amarillo neozelandés se perdió, por ello Zespri desarrolló una nueva variedad, la SunGold.