Los padres de don José María Martínez Salinas fueron el señor Crisanto Martínez y la señora Estefanía Salinas.
En 1820 contrajo matrimonio con Margarita Guillén Chávez, en la ciudad de Comayagua.
En consecuencia el presidente Martínez le entregaría la administración a su sucesor.
El 12 de noviembre del mismo año, mediante DECRETO sancionado por Martínez Salinas, se declaró a Honduras como un “Estado Libre, soberano e independiente” a partir de este momento se desvinculaba de la Federación Centroamericana y de todo gobierno o potencia extranjera.
[1] En su presentación del discurso a la Asamblea Nacional Constituyente, se indicó que el país tenía una población aproximada a 200,000 habitantes.