Perteneció al cuerpo diplomático británico entre 1960 y 1964.
Sus personajes, entre los que el más conocido es probablemente el agente Smiley, son complejos y turbios.
[2] Una parte importante de sus novelas ha sido llevada al cine y todas se han traducido a numerosos idiomas.
[3] John le Carré no admitía ningún tipo de premio literario ni títulos ni distinciones y los rechazó en numerosas ocasiones.
[4] A pesar de todo, algunas instituciones persistieron en premiarle, como el Instituto Goethe, que le otorgó en 2011 la Medalla Goethe.