Gong Ji-young

[3]​ Sus primeras obras tratan precisamente de esa época estudiantil y de compañeros que como ella crecieron en un tiempo caracterizado por violentas protestas y turbulencia política en Corea del Sur.

Sus obras se centran en los trabajadores, los no privilegiados y quienes sufren discriminación.

[5]​ También ha escrito de forma extensa sobre mujeres jóvenes con estudios que intentan forjar sus vidas con familia y sin ella.

A medida que el caos y la represión de los ochenta dio lugar a la relativa calma y prosperidad de los noventa, los estudiantes que tanto se habían sacrificado en la consecución de las deseadas transformaciones sociales, acceden a un mundo que ya no parece necesitar su fervor revolucionario ni su entrega.

[6]​ A finales de los noventa continuó dedicándose a esas temáticas, pero otorgando mayor fuerza creativa al tratamiento de personajes no privilegiados, los discriminados por la sociedad coreana.