Su inquietud por el sacerdocio lo lleva a solicitar su ingreso, en 1978, al Seminario San José, en Caracas, para realizar estudios de filosofía y de teología en el Instituto Universitario Seminario Interdiocesano Santa Rosa de Lima.
Posteriormente, en 1993, fue enviado a Roma, donde se formó en Teología Espiritual en la Pontificia Universidad Gregoriana y obtuvo la licenciatura, summa cum laude, en 1995.
El Cardenal Jorge Liberato Urosa Savino, arzobispo de Caracas lo consagró.
Sus asistentes fueron Baltazar Enrique Porras Cardozo, arzobispo de Mérida (Venezuela), y Ubaldo Ramón Santana Sequera.
Sucedió al Cardenal Diego Padrón Sánchez, quien pasó a ser el Arzobispo emérito de dicha metrópolis arzobispal.