La canción es una balada dramática, en la que se describe una historia de amor juvenil con un desconocido «que viene del norte» - «y yo era una niña sol».
El extranjero es acogido por el padre del narrador, quien también le da alojamiento y trabajo «en el viejo roble».
Entre los dos surgió la pasión: «cada ardiente invierno nuestro amor hizo temblar la tierra», pero un día los hombres vinieron a buscar al extranjero.
«Le dieron las gracias a mi padre y se fueron», tras lo cual la canción termina con «la hija del sol» pidiendo el retorno de su amante.
La canción también fue grabada en alemán («Sonnenkind») e italiano («Ragazza sole»).