Javier Sangro

Estuvo destinado en las representaciones españolas en Arabia Saudí, Bélgica, Representación Permanente ante la Alianza Atlántica, Argelia, Reino Unido y Marruecos.

Fue vocal asesor en la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales y subdirector general de Relaciones Económicas Bilaterales.

Colaboró en revistas especializadas de poesía, así como en el libro de Alfonso Viada Reunión y éxtasis.

En 1994 publicó su primer libro de poemas, El último nudo -prologado por el también poeta Luis Alberto de Cuenca-, que obtuvo críticas elogiosas en los principales suplementos literarios.

En 2000 publica su segundo poemario De todo lo visible y lo invisible, con ilustraciones del pintor ovetense José Pantaleón.