En 1995, sería recordado más precisamente por haber sido el verdugo de Gimnasia y Esgrima La Plata.
Tras una dos muy buenas temporadas, Mazzoni lograría llegar a la Liga Española, fichando por el Racing de Santander en el año 2000.
Tras dos temporadas, Mazzoni decidió cambiar de aires y se mudó a Brasil, donde jugaría para Figueirense.
Sin embargo, no logró adaptarse y volvió a España, en 2003 para jugar en el Polideportivo Ejido.
Ya en su segunda aventura en España, Mazzoni sintió necesidad de volver a su país natal.