En el 2010, Gonzales sufrió la amputación de su pierna izquierda al parecer por negligencia médica.
Tras un paso a préstamo en Unión Callao de la liga del Callao en 1958, al año siguiente, debutó en la primera división del Perú en Sport Boys.
Y jugó por el cuadro rosado durante casi toda la década del sesenta.
En 1966 formó una línea defensiva bastante buena con Walter Milera, Zózimo y Popi Correa.
Tras su retiro como futbolista, fue entrenador de Deportivo Sima, Defensor La Perla, entre otros clubes del Callao.