En la segunda mitad del siglo XIX, el Paseo da Estrella estuvo de moda y en el momento poseía elementos que ya no existen, como invernaderos, quioscos y un pabellón chino.
En los años 70 del siglo XIX, existía un león en su jaula que fue donado por Paiva Raposo, comúnmente conocido por León da Estrella, que estaba instalado en un pabellón cerca de la entrada de la avenida Pedro Álvares Cabral.
El jardín está abierto al público todos los días, desde las siete de la mañana hasta la medianoche.
Las entradas están compuestas por puertas de hierro forjado, el jardín delimitado con rejas del mismo material.
Junto a varios lagos del jardín pueden ser encontrados ánades reales, cisnes y gansos.