Pero el intento de aclimatación en su traslado a la península no funcionó, pues el clima del interior de la península ibérica, es muy diferente del que hay en Tenerife.
El proyecto ha sufrido diferentes retrasos y finalmente está finalizándose, habiéndose fijado la fecha de inauguración para 2017.
La ampliación del jardín se aborda con un proyecto arquitectónico que plantea un recorrido a través de los diferentes espacios que guardan y protegen los diferentes ambientes del jardín, uniendo delicadamente el medio urbano y el ambiente natural (y rural circundante, pues el jardín se encuentra rodeado de plataneras en la parte más lejana al mar), utilizando el jardín histórico como preámbulo y final de la visita.
El agua toma un especial protagonismo en un jardín de estas características.
El gran salto de agua donde confluyen los cursos que discurren por los diferentes espacios del bosque tropical determina se transforma en el núcleo de interés del jardín.