Yolanda de Polonia

En 1256 fue entregada como esposa al duque de Gniezno (Polonia), Boleslao el Piadoso, y el matrimonio fue celebrado en Cracovia.

En 1279 falleció su esposo, tras lo cual Yolanda dividió los bienes entre la Iglesia y sus parientes, dándole parte a su hermana viuda, Santa Kinga.

Yolanda se retiró después a un convento.

Sin embargo, tras la muerte de su hermana en 1292, se mudó al claustro de Gniezno construido por su fallecido esposo y se hizo monja.

Luego de que junto a su sepulcro ocurriesen sanaciones milagrosas, fue beatificada en 1827[1]​ por el papa León XII.

La beata Yolanda recibiendo la revelación divina