Inductivismo

Así, un argumento inductivo es fuerte cuando es altamente improbable que su conclusión sea falsa si las premisas son verdaderas.

El inductivismo se caracteriza por tener cuatro etapas básicas: En una primera etapa se debe observar y registrar todos los hechos y luego analizarlos, para luego clasificarlos ordenadamente.

En la última etapa se deduce una implicación contrastadora de hipótesis.

Esta implicación debería ocurrir en el caso de que la hipótesis sea verdadera.

La utilización de este método puede llegar a organizar un campo Gestalt.