Tomozuru
fue el tercer y penúltimo buque torpedero japonés de la clase Chidori, botado en 1933, protagonista del incidente que lleva su nombre y que forzó un cambio en la arquitectura naval japonesa.Pese a ello, las pruebas fueron superadas, aunque se añadieron protuberancias al casco para aumentar su estabilidad.El buque fue localizado al día siguiente, zozobrado, por un hidroavión de reconocimiento, siendo posteriormente remolcado a puerto.Tres de ellos lograron dejar el buque por sus propios medios, y otros diez se mantuvieron en su interior en bolsas de aire hasta que el agua fue expulsada en el dique seco.Tras el análisis del incidente se comprobó que la inestabilidad del buque era manifiesta, y extensible a otras unidades navales, que necesitaron de reformas.