También divulgó la música devota del Islam, a la que consideraba como el mejor camino para el desarrollo espiritual, añadiéndole además técnicas tradicionales de meditación.
Su abuelo, Maula Buksh, que fue famoso en su época como músico-poeta sufí de elevada espiritualidad, le enseñó los secretos del arte de la música devota, y tiempo después su éxito con los rajás y el público culto indio resultó extraordinario.
Fue iniciado en la Orden Sufí de Khaja Moinudin Chishti por Seyed Mohammed Madani, quien lo alentó a dejar la India para visitar Occidente.
Inayat Khan entonces visitó Estados Unidos en 1910, donde dio conferencias en las universidades de Columbia y Nueva York.
Debido a su herencia sufí y la espiritualidad filosófica Vedānta/Shankara, Inayat Khan continuó con la enraizada tradición india de tener a la espiritualidad sobre el credo y la noción india de la tolerancia religiosa, inspiradas en buena medida en la tradición mogola en la que los creyentes, especialmente los hindúes y los musulmanes, podían vencer sus diferencias en pos de lograr la unidad espiritual.