Iglesia de Santo Tomás y San Felipe Neri

Tras la desamortización el resto del complejo conventual fue demolido y sólo quedó el templo.El edificio está inspirado en modelos barrocos de Roma, reconocibles especialmente en la amplia fachada.Construida de ladrillo rojo con elementos de piedra en resalte, sigue la forma de la iglesia romana del Gesú y está formada por dos cuerpos: uno inferior más ancho coronado por un entablamento y con un arco rebajado sobre la puerta, y otro superior más estrecho, que corresponde sólo a la nave central, se remata por un frontón triangular y dispone a sus lados dos grandes volutas.Pilastras, ménsulas y estatuas componen una imagen muy clásica que se completa con el campanario y su curioso reloj de sol dieciochesco.Tiene además un amplio crucero sobre el que se alza un gran cúpula y contiene ricos fondos pictóricos, con lienzos de José Vergara, Espinosa o Vicente López.