Iglesia de la Conversión de San Pablo (Cádiz)

Rosario de nuestra Señora del Sagrario; cuyos respectivos cofrades han concurrido a tan Santo objeto con sus propios caudales y no pocas limosnas que con su industria e incesante trabajo han recolectado entre los demás Fieles…».

Está dividida en tres tramos por medio de pilastras dóricas sobre las que corre un entablamento cuyo friso se decora con triglifos y la cubierta es de medio cañón con arcos tajones, con vanos en la actualidad ciegos, elevándose una cúpula semiesférica sobre pechinas ante el presbiterio, con varios vanos que permiten la iluminación.

La corona de espinas, es moderna, y fue tallada por José Miguel Sánchez Peña en la restauración del que fue autor en 1986.

Sobre las puertas laterales de acceso a las dependencias hay dos lienzos que representan las lágrimas de San Pedro y la Magdalena penitente, pertenecen a la escuela pictórica gaditana del neoclásico y están firmados por J. García en 1808.

Junto al retablo mayor, sobre un pedestal, se encontraba una talla de la Inmaculada Concepción realizada por José Montes de Oca en 1719, que hoy (2007) se sitúa en la mesa del retablo principal.

El ático está ocupado por un lienzo que representa a la Trinidad, atribuido como el resto de las pinturas que decoran los retablos de esta iglesia, a Francisco Javier Riedmayer, pintor alemán afincado en Cádiz.

Escena de la conversión de San Pablo.
Ecce-Homo.