El edificio actual data del siglo XVII.
En su interior destaca un retablo gótico del siglo XV.
El primer elemento destacable de esta obra es, la estructura o arquitectura.
Se apea sobre un sencillo banco o predela, dividido en cinco espacios, sobre la descarga el cuerpo principal de la obra, dividido en tres calles y rematado en un pequeño saliente, una cenefa, guardapolvo, lo recorre en todo su perímetro, en una acertado enmarque, este marco sirve de soporte a un conjunto de pinturas, sobre tabla, tres tablas de gran tamaño en el cuerpo principal y otras siete de menor volumen, es una obra realizada con la técnica del óleo y dentro de las pautas establecidas por los pintores flamencos de la primera mitad del siglo XV.
[1] El Espíritu Santo aparece representado con forma femenina.