Los primeros misioneros católicos visitaron Vietnam procedentes de Portugal a inicios del siglo XVI.
Recién los jesuitas en las primeras décadas del siglo XVII lograron establecer posiciones cristianas entre la población local.
El sacerdote y misionero francés Pigneau de Behaine jugó un papel preponderante en la historia del cristianismo vietnamita.
[4][5][6][7][8][9] Pigneau se convierte en el confidente de Nguyen Anh,[4][10] y luego en su asesor político.
[11] Desde 1794, Pigneau toma parte en las campañas militares, organizando la defensa de Dien Khanh cuando fue asediada por un ejército local muy superior.