III Cumbre de Unasur

La situación de conflicto derivada de los temas tratados en la cumbre anterior dio lugar a la convocatoria inmediata de otra Cumbre de UNASUR para seguir tratando el tema.

Se realizó con la presencia de todos los mandatarios de los países miembros, incluido Álvaro Uribe.

[1]​ En esta reunión, pese a las tensiones previas y a las posiciones de Venezuela y Bolivia, se dio un análisis más sereno especialmente por la actitud moderadora del Brasil, se escucharon las justificaciones de Colombia que apuntaban más que todo a la necesidad de un control efectivo del tráfico de drogas.

Se descartaron las propuestas de alianzas militares y de creación de escuelas de defensa regional formuladas por Venezuela y Bolivia, respectivamente.

Al final, el problema no pasó del nivel de simples recomendaciones, pero dejó claramente establecido el posicionamiento y los radicalismos que marcan las relaciones en la región.