Porta jugaba al fútbol y estuvo a punto de probarse en Boca Juniors.
Pero la característica de aquel Banco Nación no sólo pasó por los resultados sino por la forma en la que sus jugadores entendieron el rugby.
Siempre con él, con Hugo Porta al frente, quien aquella noche del reconocimiento, dejó una sentencia que hoy mismo podría repetir.
Se convirtió en el capitán de los Pumas y los condujo en inolvidables encuentros, destacándose internacionalmente.
El segundo test- match terminó empatado en 18 –todos los tantos fueron convertidos por Porta- casi en un duelo personal contra Jean Michel Aguirre, figura de los galos.
Fue parte del equipo nacional y la gran figura del conjunto argentino que venció por primera vez a los Wallabies australianos por 24-13 en 1979, derrotó a los Dragones Rojos galeses comandados por Gareth Edwards y empató contra los All Blacks neozelandeses por 21-21 en 1985.
Todos los puntos del empate contra los neozelandeses los anotó Hugo Porta, merced a tres drops y cuatro penales, siendo este el máximo marcador obtenido por un único jugador argentino en un partido, y el mejor resultado que Los Pumas obtuvieran ante dicha selección,[4] hasta que 35 años después, en 2020, la marca fuera superada por otro gran rugbista, Nicolás Sánchez, casualmente también ante los All Blacks.
En ese mismo año de 1985, en Ferro, capitanea a Los Pumas en la primera victoria ante Francia por 24-16.
Un plantel nuevo y con poca experiencia fue convocado por Héctor Silva, con Porta como el capitán, que hoy es considerado nefasto por haber excluido a mejores jugadores disponibles.
Sin duda su mayor logro fue el formar parte del combinado Sudamérica XV.
Para evitar sanciones de la WR y ante la negativa del régimen militar hacia la UAR, se creó el combinado Sudamérica XV.
Porta marcó todos los puntos: anotó un drop, una conversión, un try y cuatro penales.