[1] La relación entre Stanley y Carr acabó por deteriorarse y el guitarrista la atribuyó a un supuesto alcoholismo del percusionista: «No sé si los excesos con la bebida exacerbaron su estado mental, o si, por el contrario, la bebida fue consecuencia de su infelicidad, pero su comportamiento empezó a ser errático».
Si gastamos medio millón de dólares y lo hacemos a nuestra manera, seguiremos vendiendo X».
[8] Entre los músicos de sesión que sí fueron acreditados por su trabajo estaban Regan como saxofonista en «Cadillac Dreams», la All Star Cadillac Brass como trompistas en el mismo tema, The Sisters of No Mercy (Charlotte Crossley, Valerie Pinkston y Kim Edwards-Brown) a cargo de los coros en «Silver Spoon» y Phil Ashley,[9] con quien la banda ya había trabajado con anterioridad,[10] como teclista en «Hide Your Heart» y «Forever».
[15] El álbum comienza con «Rise to It», en la cual Stanley utilizó la técnica de bottleneck y que sirvió, en palabras del vocalista, para mostrar las influencias del grupo, «la guitarra slide y el blues.
Finalmente, el grupo optó por grabarla para Hot in the Shade y su letra trata sobre un triángulo amoroso entre Rosa, su novio Tito y su pretendiente Johnny, quien muere en los brazos de Rosa tras recibir los disparos del segundo.
[18] «Read My Body» evoca precisamente a «Pour Some Sugar on Me» de Def Leppard y en su letra Stanley implora a una chica que «lea su cuerpo si quiere saber qué hay en su mente».
[18] «Love's a Slap in the Face», inspirada en «He Hit Me (It Felt Like a Kiss)» de The Crystals, está centrada en la filosofía de Simmons sobre el amor: «Cuando el amor te golpea, es como si te golpeara una almádena».
[20] «Silver Spoon» es, según el compositor Vini Poncia, «nuestra versión del tipo de canciones pop rock que Bon Jovi hacía en aquellos momentos» y en su letra Stanley quiso reflejar su pensamiento de que «llegaría a ser alguien».
[21] La cara B del álbum comienza con «Cadillac Dreams», que trata sobre vivir el sueño americano y cuyo título es una referencia a los automóviles Cadillac que, para Poncia, poseer uno de ellos era «un símbolo de éxito en Nueva York».
[21] «King of Hearts» sigue el estilo marcado por Bon Jovi, en especial «Livin' on a Prayer», mientras que «The Street Giveth and the Street Taketh Away» tuvo su origen en un riff de guitarra de Tommy Thayer al que posteriormente Simmons incorporó «el tipo de letras que Mick Jagger escribía sobre la vida callejera».
[38] Richard Paton del Toledo Blade relató que la banda «da justo en el blanco volviendo a lo básico, despojando su sonido hasta los huesos y produciendo un álbum con más fuerza que muchos roqueros con la mitad de sus edades».
[41] Thomas Kupfer de Rock Hard remarcó que «los señores Stanley, Simmons y compañía han tenido éxito una vez más en esta empresa [en poner a la gente de buen humor y transmitir diversión].
[42][43] Con el paso del tiempo, las críticas recibidas fueron menos halagüeñas y la mayoría se centró en la excesiva cantidad de canciones.
[11] Los editores del sitio Ultimate Classic Rock estimaron que «a pesar de algunos momentos sólidos —"Rise to It", "Little Caesar"— hay demasiado relleno en esta colección demasiado larga de quince temas».
[35] El periodista Eddie Trunk juzgó que «realmente hay algo de relleno aquí.
El hecho de que sus solos fueran suprimidos frustró a Carr, quien durante un tiempo se comunicaba únicamente con Corbett.
[12] Fuente: AllMusic y libreto del CD de Hot in the Shade.