El hospital cerró sus puertas en 1984 convirtiéndose tres años después en un asilo de ancianos.
[1] Dr. Joaquín Vértiz[2] Dr. Felipe Ruiz Esparza[2] El hospital funcionó desde sus inicios con áreas específicas para la atención de hombres y mujeres, además de existir una sala especial para personas que pudieran pagar la atención.
[3] Las instalaciones incluían además de las salas, quirófanos, lavandería, cocina, despensa y la administración; todavía se desconoce si existía una farmacia o botica en el lugar.
[3] Padecimientos como las enfermedades hepáticas, gástricas, infecciones crónicas, desnutrición, cáncer, tifo, influenza española, epilepsia, alcoholismo, enfermedades venéreas, cálculos biliares, cataratas, entre otras muchos se atendieron en este nosocomio.
El primero de ellos estuvo conformado por los doctores Atanasio Garza, Daniel Gurría Urgel, Mauro Villaseñor; mientras que en el segundo figuraba el doctor y antiguo gobernador del Estado de México Gustavo Baz[4] Fue en este tiempo en que la Cruz Roja Mexicana tuviera sus instalaciones en dicho hospital, saliendo las ambulancias por la 2a.