Es bien conocido por sus movimientos completamente tridimensionales, su asombrosa banda sonora y su robusta historia.
Cuando las nuevas tecnologías emergieron, los conflictos religiosos y políticos parcialmente dieron lugar a la exploración científica unida.
Más importante todavía, sin embargo, fue el hallazgo de una piedra, que tenía tallado un mapa galáctico con dos coordenadas: Una marcaba a Kharak.
La otra mostraba un nombre tan antiguo que era común en todas las lenguas y dialectos: Hiigara.
La nave fue hecha robusta y autosuficiente, con el fin de sobrevivir a los posibles problemas durante el largo viaje.
Este andamio fue la única luna que tuvo Kharak, y fue vista por 4 generciones de personas.
El proyecto estuvo a punto de cancelarse, hasta que una joven experta en neurología propuso una solución.
Órdenes como el movimiento y las formaciones se dan tanto desde los menús como desde las teclas de acceso rápido.
Esta característica, junto con los escasos recursos en cada nivel, fuerza al jugador a tomar difíciles decisiones sobre la conformación de su flota.
La meta final es encontrar el mundo hogar (Homeworld) de la raza con la que se juega.
A pesar de esto, la nave nodriza, los transportadores, los investigadores, esencialmente tienen el mismo propósito, permitiendo al jugador construir y mejorar unidades.
Aunque, no literalmente esencial, la larga compilación de mapas multijugador, conocidos como Los Archivos Homeworld (The Homeworld archives), es una descarga importante para aquellos que quieren aliviarse de tener que bajar uno por uno los mapas creados por los fanáticos para su uso en el juego en línea.
Homeworld estuvo indudablemente influenciado por muchos juegos RTS, libros, y películas ya existentes.
En septiembre de 2000, Barking Dog Studios lanzó una expansión independiente o seudo-secuela denominada Homeworld: Cataclysm.
En el juego los Hiigarianos (los Kushanos establecidos en Hiigara) debían defender su planeta de los Vaygr, una poderosa raza nómada.
Relic lanzó el código fuente de Homeworld en 2003, lo que permitió versiones no oficiales del juego para otras plataformas, como Linux y Mac OS X.
El juego fue elogiado por sus efectos, su motor gráfico, las grandes batallas, su apropiada banda sonora, su completo argumento y su revolucionaria interfaz 3D.