La película de 1933 Hitlerjunge Quex: Ein Film vom Opfergeist der deutschen Jugend se basó en ella y fue descrita por Joseph Goebbels como la "primera transmisión a gran escala" de la ideología nazi utilizando el medio del cine.
En el juicio posterior, varias personas fueron sentenciadas por el tribunal de Landgericht I en Moabit, sin embargo, los cómplices más prominentes Willi Shimon, Bernhard Klingbeil y Harry Tack pudieron escapar a la Unión Soviética.
En toda Alemania, los nazis organizaron manifestaciones y discursos en conmemoración de su mártir recién creado.
La novela Der Hitlerjunge Quex fue escrita por Karl Aloys Schenzinger entre mayo y septiembre de 1932.
Fue publicado por primera vez en el periódico del partido nazi Völkischer Beobachter, y como libro en diciembre de 1932.
La obediencia y la igualdad, tal como la entienden los nazis, se presentan de manera muy positiva.
Resultan beneficiosos no solo para Heini, sino también para sus camaradas, por ejemplo, su mejor amigo Fritz Dörries, el hijo de un rico comerciante.
Sus camaradas lo apodaron Quex porque "cumplía órdenes más rápido que Quicksilver" (en alemán: Quecksilber).