Su gobierno, ubicado entre los dos regímenes militares de Jerry Rawlings, es recordado históricamente como la "Tercera República".
[1] Sin embargo, la legitimidad del nuevo gobierno se vio mermada por la extremadamente baja participación, menor al 40%.
[2] A diferencia de los líderes electos anteriores del país, Limann era un ex diplomático y una figura no carismática sin seguidores personales.
[2] El Congreso de Sindicatos afirmó que sus trabajadores ya no ganaban lo suficiente para pagar los alimentos, y mucho menos cualquier otra cosa.
En septiembre, el gobierno anunció que despedirían a todos los trabajadores públicos en huelga.
[2] Tras la caída del último gobierno militar, en 1992, Limann continuó activo en la política ghanesa, presentándose como candidato a la presidencia en las primeras elecciones libres, bajo su nuevo partido, la Convención Nacional del Pueblo, que quedó en tercer lugar con el 6.7% de los votos.