Consiste en lanzar unas herraduras de metal en forma de rodaja con una perforación en el centro, desde 12 metros, sobre una barra clavada en el suelo que sobresale 1,20 metros, buscando insertarlas.
El juego puede ser individual o por equipos, y es ganado por quien introduzca más herraduras, o de no insertarse, quien más se aproxime a la barra.
Según algunas teorías, este juego tiene su origen en el lanzamiento de disco.
Los jugadores, una vez situados en la línea de lanzamiento y según turno establecido previamente, lanzan las herraduras intentando que entren en la varilla o se aproximen a ella lo más posible.
Después de cada tirada se recogen las herraduras y se contabilizan los puntos conseguidos según el siguiente baremo: