Helianthemum violaceum

Las hojas son lineales a lanceoladas, de 3 cm de largo, en pares opuestos y están cubiertas de pelos grisáceos a blancuzcos, especialmente en el reverso, y los bordes se enrollan.

[1]​ Helianthemum: nombre genérico que deriva del griego antiguo Ἥλιος (Helios), "el Sol" y ανθεμοζ, ον (anthemos, on), "florecido", pues las flores solo se abren con el calor del sol (necesitan una temperatura superior a 20 °C para desplegar sus pétalos) y tienen un cierto fototropismo positivo.

Ciertos nombres vernáculos en castellano, tales como Mirasol, corroborarían esta interpretación.

Autores sostienen que su nombre es debido a la semejanza de la flores amarillas con el astro solar; sin embargo muchas especies son blancas, anaranjadas, rosadas o purpúreas, lo que no encuadra con esta interpretación.

Otros por el afecto que tendría el género por los sitios soleados... violaceum: epíteto latíno que significa "de color violeta"[2]​ En español se la conoce como "tamarilla", "jarilla", "perdiguera", "zamarrilla", "zamarrilla negra" y "zaramilla".

Detalle de la flor
Vista de la planta
Flores