Está casado con Raquel Glufke Hoffmann Endres y tiene dos hijos Enzo e Eric.
Su hermano Murilo, también juega por el seleccionado nacional de Brasil, y en las Serie Italiana A.
Sus principales características en el equipo son su excelente bloqueo (es considerado por muchos como el mejor bloqueador del mundo), garra, y potente saque.
Fue convocado para la selección juvenil en 1994, participando durante dos años.
Juega 2 año por el Ferrara, en el 2003 se fue para Latina jugando por un año, desde la temporada del 2004 juega por Sisley Treviso (ITA).