Günter Grass

Sus padres tenían una bodega junto a un pequeño apartamento de dos habitaciones en Dánzig-Langfuhr (hoy Gdańsk-Wrzeszcz, Polonia).Tuvo notable participación en el Grupo 47 de escritores alemanes, que se reunía dos veces al año: era un colectivo de jóvenes autores, luego destacadísimos, que leían fragmentos inéditos y se enfrentaban a la crítica de sus colegas (los organizadores enviaban tarjetas cíclicamente a personas muy dispares, ajenas al grupo).Estas reuniones del Grupo 47 dieron voz, incluso finalmente en Europa, a una nueva generación de escritores.Por otra parte, Günter Grass tuvo una activa participación política en toda su vida.De hecho se mantuvo siempre muy cercano al partido socialdemócrata y ayudó entre otros a Willy Brandt en sus campañas (como puede leerse en Diario de un caracol), que fue decisivo para el cambio alemán.Además se opuso, tras la caída del Muro, a una reunificación apresurada e invasiva con la antigua RDA (Alemania: una unificación insensata).Grass solo sirvió en esa unidad unos meses, cuando tenía 17 años, por lo que ha sido defendido por Volker Schlöndorff, Salman Rushdie, su traductor Miguel Sáenz o Mario Vargas Llosa, entre muchos otros.Lo había declarado Grass sin tapujos, dice Wagenbach, pero al FAZ le interesaba en 2007 un titular: «No solo hay demasiados reaccionarios en el mundo, sino también demasiados parricidas», añadía ese especialista en Kafka al respecto.[13]​ Escribió luego El rodaballo (1977), novela que recoge sus saberes culinarios; un breve y denso Encuentro en Telgte (1981), sobre los escritores alemanes del barroco.
1986
Ficha de prisionero de guerra de Günter Grass, que indica su pertenencia a una unidad de las Waffen-SS.