La nueva dinastía siamesa, a la que remonta sus orígenes la actual monarquía tailandesa, surgió para unificar Siam, alrededor del año 1770.
Al final de enero de 1766, los ejércitos birmanos habían superado las defensas siamesas numéricamente superiores, pero mal coordinadas, dirigiéndose a la capital del reino.
Pero el rey Hsinbyushin, de Birmania, consideró que la guerra china era una disputa fronteriza menor, y decidió continuar con el asedio.
[1][5] Cuando llegó la estación seca, los chinos lanzaron una invasión de Birmania mucho mayor, pero Hsinbyushin aún rechazó retirar las tropas.
Los birmanos también habían derrotado una cuarta invasión china alrededor de 1769.