Un guardapelo es un colgante que se abre para revelar un espacio usado para almacenar una fotografía u otro pequeño artículo como un rizo de pelo.
Los guardapelos se regalan generalmente a los amados los días de celebración tales como el día de San Valentín y ocasiones especiales tales como bautizos, bodas y lo usaban durante la época victoriana, en entierros.
[1] Los guardapelos se llevan generalmente en cadenas colgadas alrededor del cuello y contienen a menudo una foto de la persona que lo regaló.
Vienen perfilados en muy variadas formas tales como óvalos, corazones o círculos y se hacen generalmente de metales preciosos tales como plata u oro blanco u amarillo, convirtiéndolos en un objeto de joyería decorativa.
Los guardapelos contienen por lo general solo una o dos fotografías, pero algunos fabricados especialmente pueden contener hasta ocho.