Posteriormente, en 1936, fichó por el Villarreal C. F., aunque tuvo que abandonar el club tras el estallido de la Guerra Civil Española.
Tras finalizar la guerra, Gonzalo volvió al mundo del fútbol con el C. D. Castellón, en el que permaneció durante una temporada.
Tras finalizar el año fue traspasado al Real Madrid C. F., club en el que estuvo durante tres temporadas.
En la temporada 1947/48 consiguió mejores resultados con el club vigués, llegando a la final de la Copa del Rey y acabando cuarto en liga.
Llegó a jugar un total de 60 partidos en nueve temporadas con el club vigués.