En mayo, el general Sonthi Boonyaratglin aseguró que los militares no intervendrían en la situación política.
[9] Se creó un Consejo para la Reforma Democrática bajo la Monarquía Constitucional (posteriormente denominado únicamente Consejo para la Reforma Democrática para evitar suspicacias con respecto a la situación de la Monarquía) ante el que debían presentarse el día siguiente todas las altas autoridades de los ministerios y funcionarios de mayor rango, y que asumía el poder ejecutivo colegiado hasta la transición política.
[10] Según diversas fuentes, ese mismo día los jefes de los tres ejércitos (Tierra, Aire y Armada) se reunieron con el Rey para proponer un gabinete con el general Surayud Chulanont, hombre de la total confianza del consejero real Prem Tinsulanonda, como primer ministro interino.
[14] Horas más tarde, sin embargo, los canales de noticias de medios en inglés, como CNN y BBC, no pudieron seguir informando a la población tailandesa y todos los medios del país fueron sometidos a censura.
[23] Después de la jornada festiva del día anterior, decretada por la Junta Militar, los comercios, entidades financieras, empresas y transportes internacionales funcionaban con normalidad.
La venta se realizó a la compañía Temasek Holdings, propiedad pública del Gobierno de Singapur.
[38] Muchos ciudadanos de Bangkok y las zonas limítrofes salieron a la calle desde el primer día para expresar su apoyo al Ejército.
Los soldados fueron reclamados como atractivo turístico para posar en fotografías junto a adultos y niños.
Los militares en 1992 regresaron a los cuarteles y hasta hace algunos meses no habían existido especulaciones o rumores sobre un posible golpe de Estado.
[51][52] Abhisit Vejjajiva, líder del Partido Demócrata de Tailandia, manifestó que no se podía dar apoyos a este tipo de soluciones al margen de la Constitución, pero que sin embargo se había hecho, pidiendo a la Junta Militar que levantase lo antes posible las restricciones a los derechos y libertades.
[54] El depuesto primer ministro se encontraba en Londres[55] tras abandonar precipitadamente Nueva York, donde había acudido para participar en la Asamblea General de Naciones Unidas junto al vice primer ministro Surakiart Sathirathai, quien promovía su candidatura para Secretario General de Naciones Unidas.
Somkid Jatusripitak, ministro de Comercio, se encontraba en París pero regresó a Tailandia el día 21.
La junta amplió después las limitaciones de las actividades políticas dictadas los primeros días a todas las provincias y municipios.
La censura estuvo centrada en los medios audiovisuales tailandeses e internacionales, como BBC y CNN, cuyas imágenes fueron bloqueadas en varias ocasiones desde el día 19.
[81][82] El 1 de octubre el Consejo para la Reforma Democrática comunicó oficialmente la elección del general retirado, Surayud Chulanont, como nuevo primer ministro interino durante un año hasta que se celebrasen elecciones en octubre de 2007.
[83][84] La Junta Militar resolvió la creación de un comité especial anticorrupción formado por nueve miembros que investigaría los posibles delitos financieros del anterior primer ministro Thaksin.
Las autoridades atribuyeron las acciones a personas y organizaciones vinculadas al anterior gobierno depuesto, en vez de a la insurgencia del sur, aunque Thaksin Shinawatra y miembros del Thai Rak Thai lo negaron.
Días después las autoridades se retractaron de las acusaciones contra el depuesto gobierno.
[92][93][94] El Secretario General de Naciones Unidas, Kofi Annan manifestó en las primeras horas que «como ha dicho la Unión Africana, por ejemplo, no apoyamos a aquellos que llegan al poder a punta de pistola.
El país había hecho significativos progresos en términos del respeto por los derechos humanos y del imperio de la Ley, y Canadá invita a todos los partidos a seguir manteniendo estos valores».
El ministro de Asuntos Exteriores condenó todo acto que amenazase a la democracia y expresó su esperanza de que hubiera una transición pacífica del poder desde los militares a los representantes electos en el último comicios.
Gloria Macapagal-Arroyo, Presidenta de Filipinas, afirmó, junto con numerosos legisladores, que estaban muy preocupados.
La Presidenta se encontraba en ese momento en la sede de Naciones Unidas en Nueva York.
[118] El día 21, en un comunicado, la Unión expresaba que «Tailandia ha vivido varios años sin ningún conflicto político importante.
El ministro australiano, Alexander Downer, dijo que «queremos ver un retorno al imperio democrático.
En términos parecidos se mostró desde Nueva York Human Rights Watch: «suspender los derechos constitucionales no es la respuesta.
Las tres entidades de mayor prestigio se posicionaron públicamente en las 24 horas siguientes al golpe.
Moody's Investors Service por su parte manifestó que la situación financiera del país y su posición para afrontar los pagos al exterior podían estar provisionalmente afectados, pero no modificó ninguna de las ratios para Tailandia.
De entre aquellas que operaban un mayor volumen de acciones, solo Hong Kong no tuvo pérdidas, aunque la situación no solo se atribuyó a la inestabilidad política en Tailandia, sino también a la posible desaceleración del mercado estadounidense.
No obstante, los distintos informes públicos y privados consideraron que en 2007 se produciría una recuperación.