Glynis Nunn

Comenzó a hacer atletismo en su niñez en su localidad natal de Toowoomba.

Sin embargo al año siguiente solo pudo ser 7ª en los Campeonatos del Mundo de Helsinki 1983.

Esto hizo que Glynis Nunn fuera una de las candidatas a llevarse el título olímpico.

La competición fue muy reñida, con varias atletas luchando por las medallas hasta la última prueba.

La medalla de bronce fue para la alemana occidental Sabine Everts, con 6.363 puntos.