El General Electric T31 (designación de la compañía: TG-100) fue el primer turbohélice diseñado y construido en Estados Unidos.
El primer trubohélice estadounidense fue el General Electric XT31, usado en por primera vez en el avión experimental Consolidated Vultee XP-81.
El motor T31 fue el primer turbohélice estadounidense en motorizar un avión.
El T31 también fue usado en el XF2R-1 naval, motorizado por una combinación similar de turborreactor/turbohélice.
El motor también fue usado experimentalmente en un Curtiss XC-113 (un C-46 convertido), pero el experimento se abandonó después que el XC-113 se vio envuelto en un accidente en tierra.