Su idea fue crear una peregrinación alternativa al asfalto, por los montes y aldeas del interior de Asturias.
[1] Casi todas las etapas tienen un rasgo en común: inicio con subidas pronunciadas, desarrollo por sierras o cordales, y bajada final.
En algunas etapas no existe ningún acomodo ni albergue al finalizar el día, por lo que es necesario llamar a un taxi o amigo para trasladarse a una localidad competente (generalmente Infiesto y alrededores).
[2] Esto se advierte especialmente en las etapas 4 y 5, hasta el punto que el final original de la etapa 5 (La Matosa) se ha sustituido prácticamente en todas las guías por Villamayor (Piloña).
[11] Como ellos mismos advierten, la guía está hecha en el año 2011 y "muchas cosas han cambiado en el recorrido".