No era un precio caro, porque la guitarra presentaba varios defectos, el que más se notaba era el gran nudo en la madera.La guitarra, originalmente, fue pintada a negro, al que Eddie añadió unas tiras blancas; con lo que el acabado original de la guitarra fue el clásico "negro con tiras blancas".Más tarde, en la grabación de lo que sería el Van Halen II, Eddie trastocó la guitarra de nuevo y bautizó al acabado como "Bumble Bee", o lo que es lo mismo, el color amarillo y negro "abeja".La repinta y le añade más cinta dándole ese acabado por el que todos la conocen, El guitarrista decía que la pintura de Schwinn le daba un toque "pop".Para confundir aún más a los imitadores, se le atornilló un interruptor de tres vías en medio del hueco vacío del cuerpo de la guitarra.