Francesco D'Ovidio

Cuando tenía nueve años, su familia se mudó de Campobasso a Nápoles.

En 1884, empezó a tener problemas de ojos, que le provocaron la pérdida progresiva de la vista hasta llevarlo a la ceguera total.

Tuvo la cátedra napolitana hasta que la enfermedad le impidió continuar enseñando, en 1923.

En sus investigaciones se ocupó de Dante Alighieri, Torquato Tasso y Alessandro Manzoni.

Entre sus discípulos hubo Manfredi Porena, que se convirtió en su yerno al casarse con su hija Carolina.