La fortaleza, probablemente construida en el siglo XIV, se divide en tres partes que fueron erigidas en varias etapas.
La fortaleza de Golubac ha tenido una historia tumultuosa.
El lugar cambió de manos numerosas veces entre turcos, serbios, búlgaros, húngaros y austríacos hasta 1867, año en que fue entregada al Kniaz serbio Miguel III Obrenović.
En la actualidad, la fortaleza es una atracción turística muy popular en la región y uno de los lugares más visitados por las rutas en barco del Danubio.
La fortificación está estratégicamente situada en la orilla sur del río Danubio, dónde este se estrecha a su paso por la garganta llamada Puertas de Hierro[2][3] y facilitaba el control del tráfico fluvial y el cobro de impuestos, algo que en la Edad Media se hacía gracias a una gran cadena que unía la fortaleza con Babakaj, una roca en la orilla contraria.