El propósito original era que las mujeres compartiesen la sabiduría y las lecciones sobre la ocupación de convertirse en madre.
Con el tiempo, se ha convertido en algo común celebrarlo para los siguientes hijos o adoptados.
Sin embargo, esta costumbre varía según la cultura o la región, y en algunos se espera y es habitual que una mujer familiar cercana organice la fiesta, a menudo la mamá, la hermana, la abuela o la suegra.
No hay reglas para cuándo o dónde deben celebrarse las fiestas.
Los regalos típicos incluyen pañales, mantas, biberones, ropa y juguetes.