Aunque las claves PGP se usan generalmente en ordenadores personales para aplicaciones relacionadas con Internet, las fiestas de firmado de claves, no requieren la presencia de ordenadores ya que esto podría dar a adversarios la posibilidad de alterarlos para obtener información importante.
En su lugar, los participantes escriben una cadena de caracteres y números, llamada huella digital pública, la cual representa su clave.
La huella digital se crea usando una función hash criptográfica, la cual condensa la clave pública en una cadena que es más corta y manejable.
Los participantes intercambian estas huellas digitales y en ese momento verifican la identidad de esa persona.
Una vez terminada la fiesta, los participantes obtienen las claves públicas correspondientes a las personas de las que han verificado su identidad y las firman digitalmente.