Considerado uno de los periodistas más grandes del siglo XIX, se le recuerda sobre todo por su labor como correponsal de guerra.
Escribió para varios periódicos italianos y también del extranjero.
Colaboró en Italia con "Omnibus", "Raccoglitore Fiorentino", "Cronaca bizantina" y "Nuova Antologia"; en Francia con "La Presse", "Journal des débats", "Libre recherche", "Courrier Français" y "Revue de Paris"; en Gran Bretaña con "Daily News", "The Daily Telegraph" y "The Cornhill Magazine"; en Bélgica con "Indépendance Belge".
Fue observador agudo de las costumbres políticas italianas y también un prolífico novelista, centrado principalmente en temas religiosos.
Su novela más conocida es Las memorias de Judas.