En el año 1501 entró en la Orden del Toisón de Oro, y viajó a Roma en el 1508 en calidad de embajador.
Entre 1502 y 1517 tuvo el cargo de almirante en la flota borgoñona,[1] y en 1517 fue nombrado obispo de Utrecht.
En el palacio episcopal de Wijk bij Duurstede Felipe de Borgoña llevó una vida disipada, delegando los asuntos religiosos a sus sirvientes.
El humanista Gerard Geldenhouwer, que estuvo varios años a su servicio, publicó en 1529 su biografía.
[2] Fue protector del pintor Jan Gossaert, que le acompañó en su viaje a Roma.