Falacia del psicólogo

Algunas fuentes enuncian la Falacia del psicólogo como si se tratara de dos «personas» —el observador y el observado— en lugar de un observador y un hecho.Por ejemplo, En esta variante, la falacia se describe como una forma concreta del estereotipo de «parecido a mí»: lo que se desconoce acerca de otra persona se supone, para simplificar, usando cosas que el observador sabe acerca de sí mismo.Tal sesgo lleva al observador a presuponer conocimientos o habilidades, o la falta de los mismos, que posee otra persona.Por tanto, puedo suponer que esta otra persona sabe muy poco de química».Estas declaraciones alternativas, sin embargo, no coinciden con lo que William James caracteriza cuando puso su nombre a la falacia.