Eugendo fue el cuarto abad del monasterio de Condat (Jura).
También construyó una iglesia en honor de los apóstoles Pedro, Pablo y Andrés.
El monasterio se erigió como un refugio para los que sufrían infortunio pero también como una escuela de conocimiento.
En 510, convocó al hermano nombrado para ungir a los enfermos; Eugendo le pidió, según la costumbre de la época, que le ungiera el pecho, y murió cinco días más tarde, a los sesenta y uno de edad.
Pocos años después de su muerte, su sucesor, San Vivenciolo, erigió una iglesia sobre su tumba, a la cual llegaron numerosos peregrinos.