Estatuas móviles
Con el término «estatuas móviles» (en irlandés: «Bogadh na nDealbh») se denomina un fenómeno paranormal ocurrido el verano de 1985 en Irlanda, cuando varios testigos declararon que algunas estatuas de la Virgen María repartidas por diferentes puntos geográficos del país se movían de forma espontánea.[2] La estatua de Ballinspittle resultó dañada por un grupo de manifestantes pentecostalistas contrarios a la idolatría, quienes la golpearon con martillos, si bien la misma fue reparada.[4] El autor John D. Vose se propuso comprobar los hechos por sí mismo en su libro The Statues That Moved a Nation;[5] entrevistó a varios testigos, quienes le hablaron de diversos acontecimientos milagrosos.[6] Por su parte, otros expertos sostienen que el movimiento de las estatuas y otros fenómenos internacionales de este tipo, como la religión ovni y el movimiento ocultista, pueden definirse como una respuesta a la angustia existencial exacerbada por la Guerra Fría y otras causas de estrés social, aunque teniendo como principal fuente normas de carácter religioso, dinámicas familiares, y rasgos psicológicos.Al otro lado del barranco hay una pendiente cubierta de hierba sin vallar con algunos bancos, mientras que al frente se halla una caja de color azul para donativos cerrada con dos candados.